Aprende a producir una increíble tabla de aperitivos paso a paso para que puedas hacer una increíble (y deliciosa) variedad para tu siguiente juntada.
¿Qué necesito para una tabla de picada?
La base
Primero, escoja una tabla, bandeja o plato para que sea su base. La madera y el mármol son opciones populares de materiales para tableros de picada ya que son resistentes y bellos.
La forma es sencillamente una cuestión de preferencia, aunque debería considerar los recursos de su tabla al hacer sus selecciones. Ejemplificando, una tabla rectangular puede ordenar mejor tallos de vegetales frondosos largos o cuñas de queso que una cuadrada.
Para considerar: cuanto más grande sea la tabla, más dinero gastarás para llenarlo. Si quiere conservar su presupuesto bajo control, complete las tablas grandes con más productos u opte por uno más diminuto.
Los platos
Los platos dan estructura a la tabla. Utilice pequeños tazones y tazas para anclar el arreglo y ayudar a contener ingredientes sueltos como salsas, nueces y aceitunas. Asalta los gabinetes de tu cocina en busca de saleros, pequeños platos de dulces y moldes. Lo que tienes a mano es perfecto, ¡no se necesita que coincidan!
Los quesos
Si su presupuesto y ubicación lo permiten, vaya a una quesería local para obtener quesos únicos y de alta calidad. Como regla general, integre de 3 a 5 quesos en estas categorías: un queso duro, un queso suave y un queso azul.
Los sabores y texturas contrastantes diversifican la tabla y brindan a los invitados una gama más vasta de opciones para probar. Si no está seguro de qué comprar, solicite sugerencias de emparejamiento en la tienda.
Las carnes
Integre variedades de carnes curadas en rodajas finas. Colóquelos planos o colóquelos en rollos sueltos para que los invitados logren agarrarlos y morderlos de forma sencilla.
Además puede integrar carnes más duras que los invitados puedan cortar, como salchichas ahumadas y salamis, y una carne para untar como paté (hígado de pollo o pato). Varias carnes de picada famosas integran guanciale, panceta, salami duro, prosciutto y mortadela.
Las galletas
Galletas, palitos de pan, panes. Querrás integrar ingredientes almidonados, en especial si tu tabla incluye quesos y mermeladas blandas para untar.
Aquí no existe una regla precisa, aunque proponemos dar dos tipos de galletas saladas o panes con diferentes perfiles de sabor. Si alguien en su lista de invitados tiene sensibilidad al gluten, considere sustituirlo por una elección de galleta a base de nueces.
Frutas y vegetales
Las frutas y vegetales agregan color y frescura a una tabla de embutidos o carnes y quesos. Además son un sabroso contraste con las carnes y quesos ricos y salados.
Una vez que planee qué recursos integrar, considere alimentos que se puedan ingerir completos o cortados en rebanadas. Compre productos de temporada para obtener los mejores sabores (y para minimizar su factura de comestibles).
Construyendo una tabla de embutidos: ¿Por dónde empiezo?
Aunque hay muchas ideas tablas de embutidos, el proceso está algo estructurado. Inicie añadiendo estructura con platos pequeños, después coloque sus ingredientes en la tabla empezando con los más grandes como los quesos y las carnes, y después los ingredientes más pequeños como las galletas saladas y los productos frescos.
Paso uno: añadir estructura
Complete recipientes pequeños con salsas, productos para untar y artículos que se logren acomodar en la tabla. Pruebe miel, mostaza, pepinillos, aceitunas rellenas de queso azul o una selección mixta de nueces saladas.
Paso dos: añada los quesos y las carnes
Primero, sitúa los quesos. Colóquelos uniformemente en torno a la tabla y deje espacio para rebanar y sacar. Utilizamos dos tipos de Brie (un Brie robusto y cremoso y un Brie suave), queso azul, queso cheddar añejo y queso de cabra en esta tabla.
Posteriormente, añada las carnes. Colocamos el prosciutto, el salami italiano y el salami americano en pequeños montones al lado de los quesos. Está bien si los recursos de la tabla se tocan; están con el propósito de ser disfrutados juntos.
Paso tres: añada galletas
Deslice dos o tres pilas pequeñas de pan rebanado o galletas saladas entre los tazones, las carnes y los quesos. Deje que se caigan y se ensucien un poco, es parte de la belleza de la tabla. Podemos utilizar dos tipos de galletas saladas, queso asiago y semillas de lino, para complementar los múltiples sabores en la tabla.
Paso cuatro: añada frutas, vegetales y hierbas
Este último paso es la guinda del pastel. Rellene los huecos en la tabla con frutas, vegetales y ramitas de hierbas. Utilizamos rábanos completos, higos en rodajas, uvas rojas y tomillo.
Si no tiene productos frescos accesibles, sustitúyalos por frutas secas como albaricoques, cerezas y ciruelas para obtener algo dulce y masticable.
Una vez que termine su tabla, prepárela con algunos cuchillos para queso para que los invitados logren servirse solos luego de maravillarse con su obra maestra.
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